Wroclaw (pronunciado brotsguaf, más o menos) es la ciudad de los puentes, dicen que tiene más de 100 para pasar a un lado y otro del Oder (yo soy de los que estudié que los ríos importantes de Polonia eran el Vístula y el Oder, Wisla y Odra). Pero este fin de semana, de mucho calor, se ha convertido en la ciudad de los mosquitos. Ayer, cenando en el Rynek (plaza del mercado) típico de Polonia, me abrasaron las piernas, igual que hoy a mediodía en la visita de reconocimiento. Hace un rato que está lloviendo, la temperatura ha bajado y espero que los mosquitos hayan desaparecido de la faz de la tierra.
El ayuntamiento en el Rynek
La iglesia del Santo Nombre de Jesús
Catedral de San Juan Bautista desde el puente Tomski
Puente de Grundwaldzki
Panorama de Raclawice
No hay comentarios:
Publicar un comentario