domingo, 30 de mayo de 2010

miércoles, 26 de mayo de 2010

Magda, atencion a la noticia

Las dos ultimas veces que hemos jugado al tenis, le he dado una paliza a Alejandro. Preguntale, porque seguro que no te ha contado nada.

Predicción del tiempo en Doha (26/05/2010)

Pego un salto de 20ºC en el tiempo ...

Destino: Qatar

A visitar a mi amigo Gaspar y su mujer Laura, con "Los hombres de Paco", temporada 3ª, 1ª parte, en la maleta.

Prometo crónica diaria del viaje.

Paella de españoles en el Pub Kaczka





La globalidad en el mundo de los aeropuertos

Hace unos días me preguntaba una amiga mi opinión, como experto, obvio por el tiempo que paso en los aeropuertos, a su afirmación de que hoy en día viajar en avión es una auténtica lotería. Le dije: "Especialmente si tienes un vuelo de conexión". Curioso, porque pocas veces coincidimos, será por lo que me entretengo escuchándola.

Me gusta una canción que se titula Disneylandia, más la versión de Drexler que la original de Titás, y el lunes pasado, sin ir más lejos, el relato de la cancelación de mi vuelo de conexión Munich-Varsovia bien podrían haberlo escrito los paulistas: "línea aérea polaca deja tirado en el aeropuerto alemán de Munich a un viajero español residente en Varsovia". Marta, la comprobación práctica de la hipótesis no podía ser más cruel que sufrida en primera persona esta misma semana. Lo realmente lamentable es que se anunció la cancelación cuando el avión Madrid-Munich estaba a punto de aterrizar, sin margen para reaccionar, y lo peor es que tienes que aguantar a un(a) idiota tocándote los güevos, explicándote lo que no es explicable y defendiendo lo que no es defendible. Ese trabajo no lo aceptaría en mi vida, es para estúpidas con cara de palo.

Al respecto, una recomendación: señores, eviten en lo posible vuelos de conexión por los aeropuertos de Munich y el de Heathrow en Londres. Particularmente los considero una garantía de lío, al menos.

Viajar en avión se ha convertido en un juego de azar. Entre cancelaciones por causas técnicas, huelgas encubiertas de pilotos, reclamaciones de personal de tierra, migrañas de controladores aéreos, airmadrides, nubes de cenizas de volcanes islandeses y cualquier otra disculpa, hoy en día ya no sabes donde vas a dormir ni porqué.

Este viajero español escribe desde el aeropuerto turco de Estambul rumbo a la ciudad qatarí de Doha.

sábado, 15 de mayo de 2010

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