Esta pregunta me la hacía hace unos pocos días, viniendo hacia USA, un compi de la oficina de Oviedo, en alusión a unos recortes en las políticas de viajes que pretende implementar la empresa en la que trabajo. Son normales, o tardíos, por la época en la que nos encontramos, y más parecen atender a algún impulso floral (si, el del anuncio) que a una meditada vía de disminuciòn de gastos.
De cualquier forma, es un recorte. Volar en gallineru es un horror. No sólo el cuerpo llega agotado, sino la cabeza, que es mucho peor. Tu pretendes engañarle diciéndole: "que si, gallu, que si, ahora hay que dormir, y ahora hay que comer", pero el resultado es que el cuerpo hace lo que que quiere cuando quiere, y no responde a la cabeza, y peor es aún cuando la cabeza ni es capaz de darle órdenes al cuerpo. Entonces es cuando uno hace la comida fuerte del día a las 5 de la mañana.
En fin, que recorte-gallineru-yetlaj viene siendo una concatenación lógica de ideas, que inevitablemente me vendrán a la cabeza cada vez que oiga en la tele que alguien pretende subirnos los impuestos o quitar un par de pagas a los jubilados.
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